Desde una perspectiva política y técnica, y ad portas de su tramitación en el Senado, Andrés Velasco, Juan Andrés Fontaine, Alberto Cuevas y Carolina Fuensalida debatieron sobre los pilares e impactos de la reforma.
Un intenso debate se vivió en la primera jornada del seminario La Columna vertebral de la Reforma Tributaria: Análisis y Proyecciones organizado conjuntamente por el programa de magíster de la Facultad de Derecho UC y su Dirección de Educación Continua.
El seminario, que abordó los temas más controversiales de la reforma presentada por el Gobierno, contó con la participación del exministro de Hacienda, Andrés Velasco y el exministro de Economía, Juan Andrés Fontaine, quienes abordaron el proyecto desde la perspectiva política-económica, para luego dar paso a un debate técnico a cargo del actual coordinador de políticas tributarias del Ministerio de Hacienda, Alberto Cuevas y quien ocupara ese cargo durante la administración del expresidente Piñera, Carolina Fuensalida.
La primer aparte del encuentro, moderado por el profesor Derecho UC Rodrigo Álvarez, comenzó analizando el procedimiento que se ha seguido para impulsar el proyecto, aspecto que fue criticado por los panelistas Velasco y Fontaine.
"Yo estoy a favor de la reforma tributaria", comenzó aclarando Velasco, pero ésta "no solo ha sido mal tramitada, sino que también ha tenido un origen que deja bastante que desear".
Juan Andrés Fontaine, en tanto, aseguró que "el gobierno interpretó que el hecho de haber obtenido una gran mayoría en las presidenciales le da la autoridad para imponer una reforma tal como estaba descrita en el programa, y eso no es así". Asimismo, acusó a la Cámara de Diputados de grave abandono de deberes y al ministro de Hacienda de internar "pautear el tipo de debate que él supone que el Congreso puede darle" y de plantear que el corazón de la reforma no es debatible.
Ambos panelistas enfatizaron la falta de estudios empíricos sobre la abolición del FUT y cómo se estructurará el incentivo a la inversión y al ahorro. En esta línea, Velasco calificó como paradojal que el debate esté centrado en el FUT, instrumento que ha permitido abusos sistemáticos por parte de las empresas. Planteó dos causes alternativos: conservar el pago de impuestos sobre la base distribuida y conservar la idea de que hay integración o imputación, pero reducir radicalmente el ámbito de posibles abusos, o acabar con la integración o imputación entre sistemas y, en ese caso, dejar que las empresa y las personas paguen lo que a cada uno le correponda.
Contrariamente, Fontaine abogó por la mantención del instrumento. "Una opción es mejorar el FUT para cerrar las filtraciones que tenga y por esa vía mantenerlo. La opción alternativa, a mí no me queda claro qué persigue porque la desintegración del sistema no recauda más y crea un problema de equidad horizontal". Propuso, a su vez, dividir el proyecto de Gobierno en dos: una primera parte, de fácil aprobación, referida al alza de tasas y una segunda, de largo aliento, donde se discuta el cambio del sistema impositivo.
En cuanto al impacto de la reforma en el ahorro y la inversión, el exministro de Economía, explicó que este cambio dañará la capacidad de ahorro y de inversión de la economía. "En todas partes del mundo se considera que un aumento de 20% a 35% marginal sobre las utilidades reinvertidas de las empresas no pueden sino afectar fuertemente la inversión (...) Siendo el propósito de esta reforma en parte, combatir la desigualdad, desde el momento en que afecta la creación de empleo, crea cesantía, conspira esa consecuencia directamente contra el propósito de crear más igualdad".
Velasco, en tanto, aseguró que "si la corazón de la reforma es recaudar más y de modo justo, entonces hagamos un debate acerca de cuáles son las mejores maneras e instrumentos para alcanzar los tres puntos del PIB que necesitamos". Aseguró que existe un monto mecánico de caída del ahorro y que no existen estimaciones empíricas que midan cuál será su impacto en la inversión. "El potencial costo es que se invierta menos o si es que no se invierte menos va a haber un mayor déficit de cuenta corriente, va a haber mayor endeudamiento y potencialmente mayor vulnerabilidad".
Foro Técnico:
La segunda parte del seminario, moderada por el profesor Derecho UC Manuel Mánquez, comenzó con la intervención de Alberto Cuevas quien aseguró que, contrario a lo expuesto anteriormente, esta reforma no se está discutiendo entre cuatro. "Este debate se está teniendo de cara al país, en distintos foros universitarios como este. No es un debate que empezó en marzo o abril. Lleva bastante tiempo".
Asimismo, explicó que la reforma, lo que hace, es cambiar el momento de la tributación de las rentas empresariales. "Ya no depende del retiro de distribución o remesas, sino que ahora esas rentas percibidas y devengadas de las empresas van a tributar en cabeza de los propietarios de esas empresas, es decir en contra del impuesto global complementario".
Por su parte, Carolina Fuensalida comenzó criticando la premura de la discusión. "Me cuesta entender que cuando estamos cambiando nuestro sistema tributario de manera profundo, radical, no haya habido un poco más de reflexión o la creación de una comisión de expertos. Cuando veo que este proyecto va a entrar en régimen el año 2017, me cuesta entender que tengamos que tener aprobado el proyecto el 15 de agosto".
En cuanto al 10% de retención, Fuensalida indicó que "lo que importa es como vamos a modelar y determinar el flujo de las empresas. Al final del día no te queda otra que modelarla con un 35%, porque como dice la ley, esta retención se tiene que hace por parte de la empresa". En el caso que la empresa provisiones, explicó, "las dudas surgen sobre qué es esa provisión y cómo la voy a poder revertir".
Cuevas respondió: "el 10% para mí está claro. Lo que hace la norma es que quienes representan el 5% de las empresas del país, van a tener que aplicar la retención. La ley dice claramente que esto es una retención y por lo tanto la sociedad va a tener un derecho a recuperar sus fondos".
Sobre las nuevas atribuciones del Servicio de Impuestos Internos, la excoordinadora de políticas tributarias del Ministerio de Hacienda enfatizó tener todas las complicaciones posibles. "Me parece que esta nueva relación de verticalidad absoluta que se genera entre el SII y el contribuyente es peligrosa porque se genera una entidad sumamente empoderada y en donde el contribuyente queda bastante disminuido a ciertos derechos, claridades y certezas que se necesitan a priori".
Agregó que uno de sus principales miedos es cómo aplicará el Servicio esta nueva norma. "Cuando se toma el derecho español usamos un lenguaje ajeno y no logro entender como el SII va a poder aplicarlo. Con esta propuesta vamos a tener que ir al derecho comparado para entender qué significa configuración jurídica, impropia, artificiosa, etc. Al final del día, sólo quienes puedan pagar un muy buen abogado tributarista o de complience van a poder defenderse adecuadamente de este tipo de atribuciones".
El seminario, que buscó contribuir y enriquecer la discusión en torno a los temas jurídicos y legislativos que marcan la agenda del país, tendrá una segunda jornada el próximo 6 de junio titualda Cómo se articula la columna vertebral de la Reforma Tributaria en el que reconocidos expertos seguirán profundizando sobre los impactos de la misma.